Muchos líderes de empresas continúan buscando el crecimiento por medio de la ampliación de líneas de productos y marcas ya existentes, además de intentar explorar en nuevas regiones geográficas. Al final, el crecimiento siempre es visto como “más”: más productos en los estantes, más categorías, más marcas y más mercados.

Sin embargo, ese enfoque es exactamente opuesto a lo que los ejecutivos deberían hacer para aumentar la facturación y la ganancia. La tradicional estrategia de “crecer con más” disipa los esfuerzos de la organización, además de aumentar la complejidad de la empresa y de sus operaciones.

La mejor receta para el crecimiento, independientemente del ambiente económico, es “crecer con menos”, lo que significa, precisamente, “crecer enfocado”.